Oso Hormiguero Gigante

Biología y Conservación

El oso hormiguero gigante (Myrmecophaga tridactyla) —a partir de ahora, referido simplemente como "oso hormiguero"— es la mayor especie viviente de la familia Myrmecophagidae, llegando a medir más de 2 metros y pesando hasta 50 kg (1, 2). La especie no muestra un dimorfismo sexual evidente, siendo prácticamente imposible distinguir entre hembras y machos a simple vista. Se distribuye desde Belice y el sur de México hasta el norte argentino. En nuestro país su rango de distribución ha ido disminuyendo con el correr de la última centuria, encontrándose en la actualidad en las selvas de la provincia de Misiones, sabanas, pastizales y selvas en galería de Formosa y Chaco, y en los bosques de la región chaqueña más seca, incluyendo el este de Salta, Jujuy y norte de Santiago del Estero (2). Habiendo desaparecido de las provincias de Corrientes, Tucumán, Córdoba y Santa Fe. El área de los esteros de Iberá se encontraría cerca del límite meridional de su distribución, lo que podría explicar que nunca haya sido muy abundante en la zona. El oso hormiguero no parece ser un especialista de hábitats, encontrándose naturalmente distribuido por bosques tropicales lluviosos y secos y por áreas de sabanas y pastizales abiertos. Sin embargo, sí parece ser especialmente sensible a las temperaturas extremas, estando su distribución limitada en gran medida las regiones tropicales o subtropicales y a las áreas de baja altura dentro de éstas. Se trata de una especie de reproducción lenta, alcanzando la madurez sexual alrededor de los dos años y teniendo una única cría por año (2).

Su dieta se basa casi exclusivamente en hormigas y termitas, variando la proporción ocupada por cada uno de estos grupos según la zona y, probablemente, la época del año (1, 2, 3, 4, 5, 6, 7). Aunque los diferentes estudios difieren en el porcentaje de la dieta ocupado por cada tipo de presa, parece haber cierto consenso en que los osos hormigueros predan principalmente sobre termitas de los géneros Nasutitermes, Armitermes, Velocitermes, Diversitermes, Cornitermes y Cortaritermes, entre otras, y hormigas de los géneros Solenopsis, Camponotus, Azteca, Crematogaster, Odontomachus, entre otras. Merece destacarse la ausencia de registros de predación sobre hormigas del género Atta, a pesar de su enorme abundancia en las áreas habitadas por la especie. Su estrategia alimentaria se basa en periodos de alimentación muy breves (en general, de menos de un minuto) en cada hormiguero o termitero, abandonando éstos antes de haber agotado las presas disponibles y, probablemente, cuando el número de "soldados" se hace claramente superior al de "obreros". De este modo, un oso hormiguero necesita visitar numerosos lugares de alimentación y recorrer una distancia importante a lo largo del día. Por otro lado, es un animal que se desplaza habitualmente con cierta lentitud, recorriendo cerca de un kilómetro por hora.

Los osos hormigueros carecen de una estructura social definida, viviendo como animales solitarios la mayor parte del tiempo, con la excepción de los breves encuentros de apareamiento. En los principales estudios demográficos realizados con la especie se ha detectado una mayor proporción de machos que de hembras en su ambiente natural (5, 6, 8, 9). El motivo de este peculiar fenómeno es, hasta el momento, desconocido. Estos animales carecen igualmente de un sistema territorial claramente definido, lo que hace que exista un altísimo solapamiento en las áreas de campeo de diferentes individuos, tanto del mismo como de diferente sexo (8, 9, 10). Además de esto, cada individuo ocupa un área comprendida entre 2 y 12 km2 habiéndose estimado densidades de población comprendidas entre 0,4 y 1,3 individuos por km2 (5, 9, 10).

Su patrón de actividad es variable, pudiendo ser tanto nocturnos como diurnos. Es probable que el factor determinante en estos cambios sea la temperatura ambiente, haciéndose más nocturnos en las épocas más calientes y más diurnos en las más frías (8). Debido a que es un animal con una baja tasa metabólica que no soporta temperaturas bajas ni muy cálidas, requiere el acceso a "refugios térmicos" donde se moderen las temperaturas más extremas, como es el caso de las áreas boscosas en momentos de máximo calor o frío o de algunas áreas inundables en los momentos más cálidos. Esto hace que, aunque sea un animal que puede pasar la mayor parte del tiempo en áreas muy abiertas, necesite la cercanía de áreas boscosas, de matorral cerrado o de pastizales muy altos.

La especie está globalmente catalogada como Vulnerable -VU A1cd- (23), aunque en la última revisión sobre el estado de conservación de los Edentados se propuso que se bajara la categoría de amenaza a la de "casi en peligro" o NT (11). En Argentina la especie está catalogada como en peligro (12), aunque parece ser relativamente abundante en ciertas áreas de bosque y matorral chaqueño en las provincias de Santiago del Estero, Salta, Jujuy, Chaco y Formosa. Igualmente se ha comprobado la presencia de la especie en la selva atlántica interior de la provincia de Misiones. De hecho, la zona de los esteros de Iberá debió servir en tiempos históricos como área de encuentro e intercambio genético de las poblaciones chaqueñas y misioneras de osos hormigueros.

Dentro de su ámbito general de distribución se han identificado las siguientes principales amenazas para su conservación: a) pérdida y fragmentación de hábitat por transformación agrícola o urbana, incendios recurrentes o inundaciones para crear represas, b) mortalidad directa por incendios de grandes proporciones (13), c) atropellamientos por automóviles, d) cacería deliberada y e) muerte de individuos asociada a conflictos con perros. En el caso específico del área de Iberá, el animal carece de depredadores naturales importantes (e.g. puma o yaguareté) y, como se ha apuntado más arriba, parece contar con suficiente área de sabanas arboladas y pastizales naturales como para albergar a varias decenas de ejemplares. Como problemas principales que podrían dificultar la recuperación de la especie se encontrarían: I) la aparición de grandes incendios en antiguas áreas ganaderas donde se ha extraído el ganado y se ha acumulado importante biomasa herbácea, II) la caza por parte de la población local de ejemplares liberados motivada por la curiosidad o por el simple placer de la actividad, III) el atropellamiento accidental de algún individuo en las principales carreteras de la región, IV) los encuentros violentos con perros (y sus dueños), y V) la aparición de enfermedades infecciosas transmitidas por otros mamíferos silvestres o domésticos (14, 15, 16, 17, 18). En lo que se refiere al manejo de la especie se cuenta con suficiente información sobre las patologías asociadas a la cautividad (19) y los problemas alimentarios en ese ambiente artificial (20), se conocen bastante bien las técnicas de inmovilización y anestesia (21), y se han desarrollado técnicas eficientes para su marcaje y radioseguimiento (22).


Bibliografía:
1. Drumond, M.A. 1992. Padrões de forrgeamento do tamanduá-bandeira no Parque Nacional da Serra da Canastra: dieta, comportamento alimentar e efeito de queimadas. Tesis de Maestría. Instituto de Ciencias Biológicas, Belo Horizonte, Brasil.
2. Chebez, J. C. 1994. Los que se van. Especies argentinas en peligro. 604 páginas. Editorial Albatros. Buenos Aires. Argentina.
3. Montgomery, G.G. 1985. Movements, foraging and food habits of the four extant species of neotropical vermilinguas (Mammalia: Myrmecophagidae). Pp. 219-232 en: G.G., Montgomery, (ed.) The evolution and ecology of armadillos, sloths and vermilinguas. Smithsonian Institution Press. Washington D.C.
4. Redford, K.H. 1985. Feeding and food preference in captive and wild Giant anteaters. J. Zool. Lond. 205: 559-572.
5. Shaw, J.H. J. Machado-Neto y T.S. Carter. 1987. Behavior of free-living Giant Anteaters. Biotropica 19: 255-259.
6. Medri, I. 2002. Área de vida e uso de hábitat de tamanduá-bandeira nas fazendas Nhumirim e Porto Alegre, Pantanal da Nhecolândia, MS. Tesis de Maestría, Universidad Federal de Mato, Campo Grande, Grosso do Sul.
7. Medri, I., G. Mourão y A.Y. Harada. 2003. Dieta do tamanduá-bandeira no Pantanal da Nhecolândia, Brasil. Edentata 5: 29-34.
8. Camilo Alves, C.S.P. 2003. Adaptações dos tamanduás-bandeira à variação da temperatura ambiente no Pantanal da Nhecolândia, MS. Tesis de Maestría, Universidad Federal de Mato Grosso do Sul.
9. Braga de Miranda, G.H. Ecología e conservação do tamanduá-bandeira no Parque Nacional das Emas. Tesis de doctorado. Universidad de Brasilia, Brasilia, Brasil.
10. Medri, I. y G. Mourão. 2005. Home range of giant anteaters in the Pantanal wetland, Brazil. J. Zool. Lond. 266: 365-375.
11. Aguiar, J.M. 2004. The 2004 edentate species assessment workshop. Edentata 6: 1-18.
12. Díaz, G.B y R.A. Ojeda, eds. 2000. Libro rojo de mamíferos amenazados de Argentina. Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos. 106 pp.
13. Silveira, L., F.H.G. Rodrigues, A.T. de Almeida Jácomo y J.A.F. Diniz Filho. 1999. Impact of wildfires on the megafauna of Emas National Park, central Brazil. Oryx 33: 108-114.
14. Bechara, G.H., M.P.J. Szabo, W.V. Almeida-Filho, J.N. Bechara, R.J.G. Pereira, J.E. Garcia y M.C. Pereira. 2002. Ticks associated with armadillo and anteater of Emas National Park, State of Goiás, Brazil. Annals of the New York Academy of Sciences, 969: 290-293.
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19. Morford, S. y M.A. Meyers. 2003a. Giant anteater health care survey. Edentata 5: 5-20.
20. Morford, S. y M.A. Meyers. 2003b. Giant anteater diet survey. Edentata 5: 20-24.
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22. Guimarães Rodrigues, F.H., G.H. Braga de Miranda, I. Medri, F.V. dos Santos, G. Mourao, A. Hass, P.S. Tavares Amaral y F. Lopes Rocha. 2003. Fitting radio transmitters to giant anteaters. Edentata 5: 37-40.
23. Edentata Specialist Group. 1996. Myrmecophaga tridactyla. En: IUCN 2004. 2002 IUCN Red List of Threatened Species.